jueves, 4 de abril de 2013

Nos saludaremos por educación.

No me haces falta tú, sino tu sonrisa, tus hoyuelos, tus besos, tus te quiero, esas ganas de creer en mí, esa forma de mirarme, esa forma de abrazarme y que se jodiera el mundo si estábamos juntos.
Parece mentira, quién me ha visto y quien me ve, he dejado de llorar por ti y he decidido seguir adelante, tal vez no te olvidaba porque no quería hacerlo, porque todavía tenía la absurda esperanza de que una noche sonara mi móvil y fueses tú para decirme que habías superado tus miedos....
Echo de menos cuando  me cogías de la mano y cuando me hacías reír hasta que me saltaban las lágrimas, echo de menos esas conversaciones de madrugada y esas palabras que no se olvidan, echo de menos tu boca entrando a batalla con la mía, repasar cada centímetro de tu cuerpo con la punta de mis dedos, echo de menos que seas el motivo para sonreír cada día, echo de menos que te llevarás mi sonrisa. Se puede vivir con el corazón a trozos y la sonrisa fingida, se puede olvidar lo que no dejamos de pensar, se puede amar lo que ya sabes que has perdido.

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